¿Conseguirás llevar a tu clan vikingo a la victoria controlando el mayor número de regiones? Invoca piedras rúnicas y favores de dioses en Ragnarocks.
Índice
Ragnarocks. El juego
Ragnarocks es un llamativo juego abstracto de control de áreas del mismo autor que el aclamado Santorini.
En este peculiar juego, cada jugador controla un clan vikingo y debe y colocando piedras rúnicas para reclamar su territorio. Además, en el modo avanzado contamos con el favor de poderosos seres mitológicos para lograr el objetivo.
A pesar de su sencillez de acciones (mover vikingo e invocar piedra), plantea infinitas estrategias y en el modo avanzado, además, tenemos habilidades asimétricas que amplían mucho más su rejugabilidad..
Ragnarock. Datos del juego:
- Nº de jugadores: De 2 jugadores (posibilidad de 6**)
- Edad: A partir de 10 años
- Tipo: abstracto, puzle
- Editorial: Delirium games
- Idioma: español
- Duración de la partida: 15-30 minutos
- Dificultad: 1,80 / 5 en la BGG
- Diseñador: Gordon Hamilton
- Arte: Clark Miller
Objetivo
Ganar el máximo número de puntos al crear regiones cerradas sólo con tus vikingos dentro. Los hexágonos que estén en su interior serán la puntuación que te lleves. Quien tenga más se lleva la victoria.
Componentes
Ragnarocks es un juego llamativo con componentes de muy buena calidad:
- 6 Minifiguras de vikingos: 3 rojas y 3 blancas
- 40 Piedras rúnicas
- 1 Base plástica, que funciona a la vez de inserto
- 1 Tablero de juego a doble cara que se encaja en la base
- 32 Cartas de seres mitológicos para el modo avanzado
- Reglamento
Cómo se juega a Ragnarocks
Te contamos cómo se juega a Ragnarocks en nuestro vídeo de YouTube.
La propuesta de Ragnarocks es muy sencilla. Cada jugador tiene 3 vikingos que se sitúan a ambos lados del tablero. En su turno, deberá realizar las siguientes acciones: mover un vikingo e invocar una piedra rúnica.
El movimiento del vikingo será en línea recta desde cualquiera de los lados del hexágono en el que se encuentre (y que no esté bloqueado). Puede moverse cuantas casillas quiera pero no puede traspasar piedras u otros vikingos.
Las piedras rúnicas se invocan (colocan) de la misma forma pero partiendo de la posición final del vikingo que acabamos de mover.
Si tras poner una piedra cerramos una sección con uno o varios vikingos de nuestro color, esa región se considera asentada y contará para la puntuación final. Los vikingos que están dentro ya no se pueden mover.
Sin embargo, si se ha cerrado sin ningún personaje, se considera Región Salvaje y no puntúa. Por último, si hay vikingos de varios clanes habrá que seguir disputando, si es posible. Si no se quedará también sin puntuar.
Fin de partida
La partida a Ragnarocks finaliza cuando ninguno de los jugadores pueda jugar su turno. Esto es, mover vikingos y poner piedra rúnica.
En ese momento se pasan a puntuar las Regiones Asentadas. Se contabilizarán todos los hexágonos en su interior incluidos aquellos en los que hay vikingos pero no las piedras rúnicas. Quien tenga más puntos se lleva la partida.
Modo Avanzado y Por equipos
Además del modo básico, Ragnarocks incluye un modo avanzado y otro por equipos.
En el modo avanzado entran en juego las Cartas Mitológicas que añaden habilidades, preparaciones adicionales, condiciones de victoria y otras modificaciones muy interesantes. Antes de comenzar la partida el jugador blanco (que es el que siempre empieza) elige dos cartas. El rojo elige una y la otra se la queda el blanco. Esa será su habilidad especial durante todo el juego. Hay 32 Cartas Mitológicas lo que permite múltiples combinaciones y gran rejugabilidad.
El modo Por equipos parece más un parche que realmente un modo como tal. En este caso se hacen equipos y cada uno controla 1 vikingo o varios en caso de 2×2. También se utilizan las Cartas Mitológicas.
Partida a Ragnarocks en Glirp Games
En nuestro canal secundario Glirp Games podrás encontrar un vídeo con varias partidas a este entretenido juego.
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Opinión Ragnarocks
A simple vista Ragnarocks puede parece un juego demasiado sencillo o muy infantil. Sin embargo, una vez que lo pruebas te das cuenta de que, a pesar de sus fáciles mecánicas, tiene una profundidad estratégica bastante interesante.
Sí, sólo tienes que mover vikingos e invocar piedras, pero a poco que te despistes acabas encerrado o sin posibilidad de controlar la zona que quieres. Muy estilo damas o incluso ajedrez.
El modo avanzado le añade asimetría y, dependiendo del dios que te toque, la partida puede variar mucho. Si ya de por sí el juego es muy rejugable, las cartas le dan mucha más variedad.
Ragnarocks destaca por sus materiales, su tablero con base plástica que además sirve de inserto, las figuritas, el tablero a doble cara… Y no olvidemos el reglamento, con letras grandes, ejemplos y muy bien presentado.
Sin duda es un juego que entró sin mucho bombo pero que resultó ser un gran acierto. Se agradecen las partidas cortas que te incitan a seguir jugando una y otra vez, y además se ve muy bonito en mesa. Si juegas normalmente a 2, deberías tenerlo en cuenta.
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